Hoteles en Oviedo

El histórico hotel de los premios Princesa de Asturias se ha convertido en todo un emblema de la ciudad. Fundado en 1752 como hospicio provincial de Oviedo, se transformó en un hotel hace 51 años y está catalogado como un monumento nacional. Su fachada de estilo barroco da paso a 142 habitaciones entre las que se encuentran dos espaciosas suites reales. Alfombras de la Real Fábrica de Tapices, piezas de arte, bancos rústicos, arcones y otros muebles de gran valor decoran sus espacios y dejan constancia de la exclusividad de uno de los mejores hoteles 5 estrellas de Oviedo.

Si algo me resulta especialmente curioso de este Eurostars es la capilla de planta octogonal diseñada por el arquitecto Ventura Rodríguez, que destaca entre sus instalaciones. Pero el hotel cuenta, además, con una galería comercial, un salón de peluquería, un centro de convenciones y el aclamado restaurante La Regenta.

Con un moderno diseño, Nuvó Hotel Boutique es el mejor hotel de Oviedo en cuanto a valoración. Teniendo en cuenta que abrió sus puertas hace casi un año, parece que a este 4 estrellas no le ha supuesto mucho esfuerzo posicionarse entre los mejores alojamientos de la ciudad asturiana. Servicio de habitaciones, posibilidad de utilizar un gimnasio y spa externos, cargadores eléctricos y tintorería son algunas de sus prestaciones.

El flamante establecimiento también es uno de los mejores hoteles de Oviedo para quienes buscan alojarse cerca de la zona gastronómica y del casco antiguo. No te pierdas sus puntos emblemáticos, como el teatro Campoamor, el Campo de San Francisco —donde se encuentra la famosa estatua de Mafalda— o la catedral de San Salvador, que se puede observar desde las habitaciones más privilegiadas.

Edificado sobre una casona indiana de principios del siglo xx, Barceló Oviedo Cervantes es uno de los mejores hoteles de Oviedo para patear la ciudad. Premiado por su diseño, que combina la antigua casona con dos edificios modernos, supone la mezcla perfecta de modernidad e historia.

El restaurante La Palmera del Indiano será una apuesta segura a la hora de comer o cenar. Haciendo honor al lugar en el que se encuentra, este espacio gastronómico homenajea la cocina de los asturianos que volvieron a su tierra después de hacer fortuna en las Américas con platos que mezclan ingredientes de los dos mundos, como su famoso tataki de atún con reducción de salsa teriyaki, aguacate y mostaza dulce. El momento más demandado del restaurante es los domingos de 11:30 a 13:30, cuando es posible disfrutar de uno de los mejores brunch de la capital del Principado de Asturias.

El primer hotel diseñado por el aclamado arquitecto Santiago de Calatrava destaca por su arquitectura, caracterizada por la combinación de líneas rectas y curvas y grandes ventanales.

Está situado en el recinto del Palacio de Congresos de Oviedo, por lo que es uno de los mejores hoteles de Oviedo para quienes viajan por negocios. Para ello, cuenta con seis salones panelables preparados con moderna tecnología audiovisual.

Sus 155 habitaciones, de estilo minimalista, también están dotadas con lo último en domótica, como el hecho de poder regular el tono y la luminosidad de la habitación, un detalle que me encanta para personalizar la estancia según el momento del día. Aunque si he de elegir entre sus espacios, me quedo con el spa urbano y sus espectaculares vistas a la ciudad.

Para los viajeros que buscan relajarse después de patear la ciudad, el Hotel & Spa Princesa Munia será el mejor hotel de Oviedo por su reconocido spa. Entre sus completas instalaciones sobresalen las camas flotantes y la cascada para cervicales, además de un avalado centro estético. Bajo el nombre de Munia Total Beauty Center, ofrece innovadores tratamientos tanto para clientes del hotel como para el público en general.

Si el relax del spa te sabe a poco, podrás seguir relajándote en alguna de las habitaciones con bañera hidromasaje dúo. Personalmente opto por las habitaciones con chimenea, sobre todo si viajo en invierno. Son solo 23 habitaciones, las suficientes para ofrecer calidad y comodidad gracias a sus toques exclusivos, como el sistema especial de descanso o los detalles de cortesía de la marca Chopard.

El éxito de una escapada depende en gran medida del hotel elegido para hospedarse. Por sus tarifas, emplazamiento y servicios, este alojamiento de la cadena Marriott puede ser la opción para hacer que tu estancia en la capital asturiana sea perfecta. Sus habitaciones, que puedes abrir desde tu propio móvil, disponen de todo lo necesario para el confort y el descanso, como su insonorización. Además, podrás usar el gimnasio y el aparcamiento.

La azotea esconde un oasis en el centro de la ciudad, una terraza que en verano se convierte en el espacio favorito del hotel. Aquí se disfrutan desde los contundentes brunch de los domingos hasta las sesiones de música de los sábados por la noche, sin olvidar las puestas de sol, que hacen de AC Hotel Oviedo Fórum el mejor hotel de Oviedo donde contemplar el atardecer.

Localizado a un minuto de las estaciones de tren y autobús, este 4 estrellas es uno de los mejores hoteles de Oviedo para quienes llegan a la ciudad en transporte público. Además, recorrerla a pie desde aquí será muy fácil, ya que se encuentra cerca de los principales atractivos. Pasea entre los escaparates de la calle Uría, prueba las populares moscovitas de la confitería Rialto y descansa ante los vestigios del parque de San Francisco, donde se asentaba, hasta 1816, un antiguo convento.

Distribuidas en siete plantas, algunas de sus 118 habitaciones gozan de fabulosas vistas al casco urbano y sala de estar independiente. Todas tienen escritorio, muy práctico si en algún momento tienes que sacar el ordenador. Con un diseño clásico, de muebles de madera oscura, y gran amplitud, son perfectas para familias aprovechando la posibilidad de solicitar camas supletorias.

Combinando una localización estratégica con comodidad, en la céntrica calle de Leopoldo Calvo Sotelo, el hotel Zentral Ramiro I Oviedo es uno de los mejores hoteles de Oviedo en cuanto a precio, con tarifas por debajo de la media. Moderno y funcional, este 4 estrellas tiene 84 habitaciones equipadas con todas las comodidades necesarias, como un práctico minibar y decoración acogedora que invita al descanso. Además, tiene aparcamiento propio, un extra muy valorado en el corazón de Oviedo, donde puede resultar difícil aparcar.

Si quieres tomar algo, podrás hacerlo en la cafetería, abierta todo el día y parte de la noche. En caso de que busques platos más sofisticados, puedes acercarte a Cocina Cabal, un restaurante que combina recetas tradicionales con toques modernos, o a El Loco del Pelo Rojo, de cocina fusión.

Considerado uno de los mejores hoteles de Oviedo para organizar eventos y congresos, Silken Monumental Naranco pone a disposición de sus clientes cuatro amplios salones con capacidad para 350 personas. Después de trabajar, una sesión de gimnasio, seguida de otra de sauna, será una estupenda recompensa. ¿Y por qué no rematar el día nadando en su piscina climatizada?

A la hora de sentarse a la mesa, su restaurante El Monumental ofrece platos de inspiración asturiana y nacional en un local tan vanguardista como el resto de los espacios del hotel. Si tienes alguna restricción alimentaria, no dudes en comentárselo a sus serviciales camareros, ya que disponen de menús especiales.

Muy cerca se encuentra el monte Naranco, que da nombre a este alojamiento de la cadena Silken, con la famosa iglesia prerrománica de Santa María del Naranco, una visita indispensable en la ciudad.

Una tranquila calle del centro ovetense, por donde apenas pasan coches, es el hogar de este NH, uno de los mejores hoteles de Oviedo para disfrutar de una estancia especial gracias a su céntrica ubicación y a su diseño.

La histórica Universidad de Oviedo está muy cerca, pero también lo están la catedral de San Salvador o la calle Gascona, adonde será imprescindible acercarse para probar la sidra en sus animados locales.

Renovadas recientemente, sus cómodas habitaciones son muy luminosas y espaciosas. Están decoradas con tonos cálidos y muchas de ellas presumen de vistas a la universidad o a la catedral. Para empezar el día, nada como hacerlo con el contundente desayuno bufé del hotel, donde se sirven una amplia variedad de zumos y productos frescos, además de platos preparados al gusto del cliente. Si madrugas y este servicio no está disponible, podrás pedir tu desayuno para llevar.